En la mira es el lugar donde estoy, aunque piense que ya no me encuentro sigo siendo ese punto en la mira de la vida, vida que puede ser mía, vida que nunca estará en la mía. Como una gota que viaja desde las oscuras nubes que rodean mi cielo, vivir en una caída es lo único que puedo, es como que tener control de tu destino es un sueño de niños y que al nacer fuiste lo que ahora y siempre has sido, como los arboles que cubren el suelo ya no veo ni siento solo sé que lo que esta es porque debe estar y que lo que no, poco a poco desaparecerá. No soy parte de lo que algunos piensan que he sido, cuando las estrellas brillan en lo más alto es porque yo ya me he ido. Otra mañana, otro deseo por el cual existir, otra mañana aunque todas lo mismo pretenden trasmitir. Otra vez bajo el mismo camino que me han puesto a seguir, otra vez siendo seguido, otra vez que intento engañar al destino, ¿Por qué siempre siendo el perseguido?, me gustaría entender puesto a lo que tengo no me pertenece y lo que me pertenece ya se ha ido.
Regreso en el tiempo e intento recordar como todo esto era antes de pensar a mi manera, pero no hay recuerdos que recordar, es como un espacio en mi vida absolutamente vacio que no me permite identificar mis raíces, momentos de mi vida que nunca regresaran y que de alguna manera u otra al olvidarlos dejamos de ser lo que una vez fuimos, tan puros y tan claros que de solo pensarlo es tan extraño, quizás cuando las estrellas desaparezcan regresaré, quizás ya estoy aquí, quizás desaparecí, pero no escaparé a la mira que vive detrás de mí, tampoco moriré en sus manos puesto a que yo soy su razón de existir.
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